Qué bonito el soneto! Gracias por la dedicatoria, en nombre mío y el de todos los pueblos juntos, nuestros pueblitos, que se agigantan en nuestras personales vidas, llenas de acontecimientos sencillos y entrañables. En mi pueblo la tradición no era el calendario, sino el padrino, que solía poner su nombre a los ahija@s, en mi y mis hermanos lo llevaban a rajatabla. Ni uno cambió la tradición. Un saludo Rogelio, no sé si es real o Seudónimo da lo mismo, gracias otra vez.