Si estuviera mi querida mamá, ella me diría el año en que se represntaron estos últimos Reyes, como se llamaban. Su memoria prodigiosa le permitía recordar infinidad de anécdotas y relatos de momentos vividos con todo lujo de detalles. Algo me traspasaste en tus genes, y disfruto de momento de buena memoria, que Dios me la conserve hasta que quiera. Le doy gracias por la tuya y pro la mía que me permite disfrutar de recuerdos y de todo lo aprendido gran cantidad de datos. Cómo le gustaba, la fiesta, el baile, la tertulia, hoy hubiera aprendido a manejar internet, hubiera buscado canciones, poemas, una gozada inmensa que no le fue permitido como a tantos otros. El tiempo es inexorable, y nos lleva a nuestro pesar, como el río lleva al agua, hasta llegar a la meta. Ojalá sea un encuentro apoteósico, festivo y lleno de luz y alegría, si pudiera verlo, vislumbrarlo,... San Pablo, le fue permitido, y dice que ni el ojo vio ni el oido oyo, lo que Dios tiene reservado para l@s que le aman.