ROMANCE DEL PASTOR CIEGUITO:
Cieguito era el pastor que sin vista,
Escuchaba cantos que la hacían tanto bien,
Porque decían que había nacido el niño Jesús
En un portal de Belén, a las afueras del pueblo
Donde no lo podía ver.
Oía a los pastores el milagro de los ángeles
Anunciándoles a la vez la llegada de aquel niño
Que había que entretener.
- ¿Por dónde voy compañeros, que camino cogeré?
-Sigue con nosotros, que los almendros están por florecer…
-Otro milagro, pastores, que yo ver no podré.
-No temas amigo, que el niño te guía hacia Él
Llego hasta la cueva donde la madre acunaba
Al niño que era Rey…
Se `postro de rodillas delante de los tres:
Jesús, María y José,
Y al niño la daban calor una mula y un buey.
En su cuello llevaba un pequeño corderito
Que le ofreció a la mujer.
Todo Hera celestial y le acariciaron a el…
Sintió un picor en los ojos, y empezó de pronto a ver…
El niño le miraba…
¡Le había hecho tanto bien ¡.
Que absorto se había quedado como los almendros ala floración
-Verde todos los días para daros de beber la leche de mis ovejas
Y queso para tus padres también.
Ya no Hera cieguito. El niño Dios
Le había curado. El niño bueno de belén…
Ruiz de la cuesta
A. F. G. G.
Cieguito era el pastor que sin vista,
Escuchaba cantos que la hacían tanto bien,
Porque decían que había nacido el niño Jesús
En un portal de Belén, a las afueras del pueblo
Donde no lo podía ver.
Oía a los pastores el milagro de los ángeles
Anunciándoles a la vez la llegada de aquel niño
Que había que entretener.
- ¿Por dónde voy compañeros, que camino cogeré?
-Sigue con nosotros, que los almendros están por florecer…
-Otro milagro, pastores, que yo ver no podré.
-No temas amigo, que el niño te guía hacia Él
Llego hasta la cueva donde la madre acunaba
Al niño que era Rey…
Se `postro de rodillas delante de los tres:
Jesús, María y José,
Y al niño la daban calor una mula y un buey.
En su cuello llevaba un pequeño corderito
Que le ofreció a la mujer.
Todo Hera celestial y le acariciaron a el…
Sintió un picor en los ojos, y empezó de pronto a ver…
El niño le miraba…
¡Le había hecho tanto bien ¡.
Que absorto se había quedado como los almendros ala floración
-Verde todos los días para daros de beber la leche de mis ovejas
Y queso para tus padres también.
Ya no Hera cieguito. El niño Dios
Le había curado. El niño bueno de belén…
Ruiz de la cuesta
A. F. G. G.