Latitud: N 42º 47' 51''
Longitud: O 6º 1' 31''
Altitud: 1.089 m
A orillas del río Omaña en la carretera León-Caboalles (LE-493). Limita al norte con Cornombre y Arienza, al este con Robledo y Guisatecha, al oeste con Garueña y Vegarienza y al sur con Rosales y Folloso.

Comprende cuatro barrios: La Iriella, barrio de arriba, barrio de abajo, y El Castillo, que aunque tenga denominación propia, parroquia, escuelas, cementerio y pastos son comunes para todos los barrios.

Es abundante en agua, puesto que cuenta con los ríos Omaña, Salce (o Santibáñez según algunos) y Manzaneda. Cuenta también con la Reguerina que lleva agua todo el año debido al caudal que le da la fuente del pueblo.

Actualmente pertenece a Riello. Antiguamente a Vegarienza.
La etimología del nombre de Santibáñez procecede del desdoblamiento progresivo de: Sant Ioannis, San Ibáñez, San Ibán, San Juán (referido, claramente a S. Juan Bautista). Este santo (hijo de Zacarías e Isabel) tiene dos celebraciones anuales: 24 de junio (nacimiento) y 29 de agosto (degollación).

La Iglesia parroquial dedicada a San Juan Bautista, una ermita en el barrio de El Castillo llamada del Bendito Cristo y construida en el siglo XVII por los pueblos de Santíbañez y Guisatecha. Tiene una hermosa cúpula abovedada y el Cristo que se venera tiene mucha importancia por la zona.
La espadaña de la iglesia de S. Juan Bautista tiene dos campanas con sus nombres correspondientes, la mayor se llama "Marta" y la pequeña,"María", en recuerdo y veneración de las dos hermanas de Lázaro; los tres, entrañables amigos de Jesucristo y en cuya casa descansaba de sus largas caminatas, encontrando con esta familia gran paz, sosiego y felicidad.
"Campanas de Santibáñez, no dejeis de repicar, que este valle tan hermoso, oíros quiere escuchar".
El Castillo de Benar, casi en ruinas. Sus murallas externas fueron destruidas para sacar la piedra con la que se hizo la carretera actual a finales del siglo XIX.

El patrón del pueblo es San Juan degollado cuya fiesta se celebra el 29 de agosto con misa y comida comunitaria a la que asisten no solamente sus habitantes actuales sino también los oriundos del pueblo que habitan en otros lugares.

El 14 de septiembre es la fiesta de El Bendito Cristo. Al lado de esta ermita durante el siglo XX y hasta finales del mismo se celebraban importantes mercados de transacción de ganado vacuno principalmente. Tenían lugar los martes de cada mes en la estación otoñal y parte del invierno.

Son las mismas de todos los pueblos de la comarca: juego de bolos, el calecho (o filandón) y bailes de la tierra.
Un recuerdo entrañable para Fidel y Cándida que tenían un comercio completísimo y muy bién surtido. Me viene a la memoria, cuando de muy niño, ir a comprar con mi mami,"Soco", unas alparagatas,ó cualquier pertrecho; ver aquel lapicero sobre la oreja de Fidel, haciendo equilibrios milagrosos y sutiles malabarismos para no caerse del lugar en el que estaba, y entre un inmenso mar de cajones, armarios, baldas y estantes, encontrar con una rapidez y precisión matemática, cualquier cosa que se le pidiera. Proveían de todo lo necesario a quién allí entraba (herramientas, vinos, licores, calzado, alimentación, ferretería, ropa.. etc, etc). La sra. Cándida, con aquella dulzura y cariño que irradiaba, nos daba a los niños con una caricia, las famosas "cucas" (bolitas de colores, de anís) que siempre tenía preparadas en unos grandes tarros de cristal.
Existía el llamado "Palo de los Pobres" para acoger y dar hospitalidad a cualquier menesteroso que se acercaba por allí. Se iba pasando de casa en casa (por turnos) y el que lo tuviera en el momento de la llegada del indigente, tenía la obligación de darle comida y alojamiento. Honorabilísima costumbre omañesa que ennoblece y engrandece a esta simpar comarca.

No se puede averiguar con certeza los orígenes de esta localidad. Hay restos de castros y también de tumbas que parece proceden del tiempo en que los romanos buscaban el oro en el llamado lugar de la Puebla. Lo cierto es que tengan su origen actual casi desde la Edad Media y sabemos con toda certeza que ya en los siglos de la Edad Moderno estos lugares están habitados por caseríos. Es muy probable que el punto fundamental fuera Arienza y de ahí venga el poblado de Santibáñez de Arienza y La Vega de Arienza, actualmente Vegarienza.
El desdoblamiento etimológico progresivo de Satibáñez sería: Sant Ioannis- Sant Ibáñez-San Ibán-San Juan, que sería evidentemente S. Juan Bautista, el hijo de Isabel (prima de la Virgen) y de Zacarías. Este santo tiene dos celebraciones, (24 de Junio), que sería su nacimiento, (29 de Agosto), que sería su degollación, coincidiendo con las fiestas de Riello.
En el cuadro genealógico de los titulares del Mayorazgo de Riolago, consta que Diego de Quiñones Y Alvarez Alfonso, casó en 1668 con Catalina Rodriguez de Lorenzana en Santibañez de Arienza y fue sepultado en la iglesia de este pueblo en 1707. Consta también que Bernardino de Quiñones Lorenzana, nació en Santibáñez de Arienza y casó con Teresa Alvarez del Campillo, falleciendo en Riolago en 1773.
Es muy posible que viveran en el desaparecido palacio ó casa señorial que existía al lado de la iglesia, en la cimera de la finca conocida cómo "La Huertona" y de cuya edificación no quedan vestigios, por más que los hemos buscado. La sra. Argentina nos cuenta que la conoció, ya muy deteriorada, y que las últimas moradoras eran unas humildes hermanas que vivían muy pobremente.

Cuenta con bonitos paisajes por cualquier lugar donde se vaya. Se puede subir andando o en coche hasta el Cueto de Rosales a 1600 metros de altitud. Y es un bonito paseo la carretera actual que va desde El Castillo hasta Arienza.