En la cuesta de Valmartino y en la cuesta de las cerezales, hay dos grandes piedras, una en cada una, a las que siempre conocimos como "las peñonas"; nada de particular si no fuera porque ambas están a la misma altura, 300 codos sobre el río Esla. Algún estudioso piensa que pudieran haber sido puestos de vigilancia en tiempo de los ataques musulmanes; de echo una domina toda la zona de acceso por Vidanes y la majada y otra tiene una amplia visión de los caminos de Cistierna, Valmartino y la valleja de riego.
Donde se desvían el reguero y el camino que va hacia el pinar de los herederos de Bonifacio Garcia, hay otra piedra, hoy casi cubierta por los aluviones que tiene una cavidad similar a media sepultura antropomorfa. Cuando Almanzor hizo su devastación en la zona en el año 1000 es fácil que perdiera algún hombre, y esta piedra fuera cavada para su sepultura, ya que los árabes enterraban de medio lado mirando hacia La Meca, y la figura de es oquedad esta también en dirección a los santos lugares musulmanes
Donde se desvían el reguero y el camino que va hacia el pinar de los herederos de Bonifacio Garcia, hay otra piedra, hoy casi cubierta por los aluviones que tiene una cavidad similar a media sepultura antropomorfa. Cuando Almanzor hizo su devastación en la zona en el año 1000 es fácil que perdiera algún hombre, y esta piedra fuera cavada para su sepultura, ya que los árabes enterraban de medio lado mirando hacia La Meca, y la figura de es oquedad esta también en dirección a los santos lugares musulmanes