Turcia de Orbigo es el pueblo de España al que siempre me gusta y me interesa volver. Sus gentes, trabajadoras y amables te hacen sentirte como en casa. Es cierto que ya no es lo que era, el Orbigo lleno de estupendas truchas, el "barbadiel" con peces, renacuajos, patos y otras especies y con las mujeres de Turcia lavando sus ropas en el y helandose por el invierno sirviendo de pista de patinaje, las escuelas llenas de niñas y niños con ganas de aprender, sus caminos y tierras llenas de hombres y mujeres dejandose la piel al sol y al frio para conseguir sus frutos, las eras llenas de medas en verano con chiquillos correteando y llenando el pueblo, . Pero a pesar de ello Turcia sigue siendo lo mejor, siempre apetece acercarse y sentir el calor de sus gentes , la tranquilidad de sus calles, sus fiestas tan entrañables y ver que las raices de quienes hemos hecho nuestra vida lejos de alli siguen vivas y muy fuertes. Volver de ver en cuando a Turcia es vital, se lleva dentro y si alguien no ha ido, de verdad que merece la pena que lo haga.