VAL DE SAN LORENZO: PAGAR EL PISO...

PAGAR EL PISO

Consiste en pagar a todos los mozos una buena consumición en la cantina de la localidad, sobre todo si el novio no es maragato, para poder considerársele un buen vecino. Ese día se acuerda con el presidente de los mozos, no teniendo fecha fija, aunque debe ser como muy tarde hasta cuatro domingos desde el día que salieron de novios y antes de la celebración de la boda. El novio puede dar dinero en metálico o pagar todo lo que se beba y coma, no pudiendo faltar unos buenos cántaros de vino. También se convida a este acto a todos los hombres mayores presentes en ese momento. La cuantía del pago suele ser fija en cada pueblo.

LAS PROCLAMAS O PROCLAMOS

Pasado un tiempo de la pedida y estando ambas familias de acuerdo los padrinos de la boda (padrino bautismal del novio y la madrina de pila de la novia) establecen el día de la primera amonestación, pudiendo suplirles alguno de los padres o hermanos/as del novio/a. Son tres, con una separación entre cada uno de ellos de ocho días y celebrados en domingo.

Los lee el señor cura ante el Altar durante la celebración de la Misa Mayor. Si hubiera algún impedimento para el casamiento se le debe comunicar al señor cura lo antes posible, para pedir la dispensa o la exención de los tramites burocráticos de la boda; si los novios son parientes no se pueden iniciar las proclamas sin la concesión de la dispensa a los novios, cantándose en la ronda estos versos:

Para primos carnales,

dispensa en Roma;

para segundos primos,

en la ciudad de Barcelona

Primo que por la prima

te vas al baile,

mira que por las venas

corre la misma sangre

En la montaña estas ceremonias son más concretas e íntimas, en cambio en la llanura se adornan más.

En la primera se usan cuhetes (cohetes) y otros artefactos similares para anunciar el casamiento en los pueblos cercanos y se compone de varias celebraciones en este orden:

•Repique de campanas, precedida de la suelta de cuhetes.

•Se echa la ronda con baile (tamboril, flauta y castañuelas) para terminar con la alborada (ir casa por casa invitando a todos los vecinos a comida y bebida durante las primeras horas de la mañana).

•Se tira o echa el rastro durante la noche y se enrama la puerta de la casa de la novia y la madrina.

•Almuerzo de las proclamas, al que asisten las dos familias al completo, los padrinos, los mozos del caldo y la mocedá amiga de los novios.

•Misa Mayor de las proclamas.

•Invitación del proclamo en casa del novio (almuerzo).

•Comida en casa de la novia.

•Reparto de almendras a las mozas del pueblo en casa de la novia, que se hace antes del baile, por lo que éstas ya van vestidas o mudadas de fiesta.

•Baile popular en la pradera del pueblo (abierto por la novia todos los días de la proclama).

En la segunda ocurre lo mismo que en la primera, pero la comida se hace en casa de los padres del novio y a la sobremesa acuden muchos familiares y parientes, y todos los vecinos y allegados. Ese día la familia del novio comienza a dar sus regalos, en los que se refleja el nivel económico de quien los hace y que van desde un par de cucharas de urz o brezo (especie de arbusto abundante en la zona) hasta un juego de cobertores (mantas) con los nombres de los novios puestos con tinta sobre la lana.

En la tercera la madrina entrega sus regalos, ya que va invitada a la casa de la novia; estos, que los da solemnemente ante todos los invitados, consisten en la colcha de la cama matrimonial y el pañuelo de casada. Este último se lo pondrá a la novia el día de la boda sobre la cabeza, después de responder el sí, en el pórtico de la iglesia; normalmente es de seda natural y de color rojo carmesí de fondo, sobre el que aparecen perpendicularmente rayas verdes de diversas tonalidades; y la novia lo llevará a todos los bailes que vaya como casada.

LA VÍSPERA

Aunque ya hace días que los preparativos de la boda han empezado, el día anterior a la boda el trabajo se intensifica. Hay que echar de comer a todos los animales y dejarles preparada la comida del día siguiente (no hay que olvidar que todo el mundo cuenta con algo de ganado como complemento a otras actividades económicas y para su autoconsumo).

El ama de la casa (la madre de la novia) organiza todo lo referente a la comida:

•Descuartizar la ternera.

•Cocer las distintas carnes.

•Pelar los capones, junto a los mozos y mozas del caldo.

•Sacar la hornada de la boda, compuesta de hogazas, bollas, roscas, mazapanes de boda o roscones, dulces y pastas, empanadas, el bollo maragato y el bollo de la madrina, y que se deja de madrugada para que se haga lentamente, junto a las vecinas.

•Asar los corderos cancines o grandes, alguna tapa de ternera colgada unos días antes y algunos capones que siempre están muy sabrosos con el tomillo en el horno, aprovechando que éste sigue fuerte, ya que la lumbrada (lumbre) es achismada (alimentada) con tuérganos (raíz de la urz o brezo).

Las mozas del caldo, junto a otras amigas, revisan los trajes maragatos masculinos y femeninos con todo detalle y prenda por prenda para dejarlos impolutos y en las mejores condiciones.

La boda da comienzo al mediodía con las estampidas de los cuhetes por toda la localidad. Seguidamente las campanas repican (suenan), escuchándose el toque que avisa de la celebración del enlace. Desde ese instante aparece una de las más típicas estampas maragatas: el tamboritero, con su flauta y tamboril sonando, que es el maestro de ceremonias, que ha aprendido a tocar de oídas y que es un hombre. Todos los convidaos de la localidad empiezan a reunirse en la casa de los novios, tocando también las castañuelas. Los que vienen de fuera van llegando poco a poco contra el solpuesto (anochecer) en caballerías (caballos) y carros enramaos.

La ronda comienza a la puesta del sol. En ese momento, el tamboritero, que no ha parado de mover el palote (palo fino con el que toca el tamboril), se acerca a la puerta de la casa de los padres de la novia y se comienza a organizar la comitiva, que recorre todas las calles de la localidad.