Hola Antonio, estoy de acuerdo totalmente contigo: el problema es justamente ese: la vida en la gran o mediana ciudad rodeados de asfalto, hormigón, acero, cristal, semáforos, contaminación, ruido, vecinos arriba y abajo a los que les oímos desde roncar hasta vitorear a su equipo de futbol,.... nos ha desconectado justamente del medio que nos es propio por definición: la naturaleza; nos ha apartado del relajante color verde de la hierba y las hojas de los árboles; nos ha divorciado de escuchar el... Creo que no hay nada mas sano para un niño que criarse en un pueblo en contacto con la naturaleza y los animales. Vega me enseñó cosas muy sanas e importantes que jamás hubiese aprendido entre el frío hormigón y duro asfalto de Valladolid...!. ¡Qué pena que los niños de hoy hayan perdido el contacto con los animales!: según ellos (y con razón) la leche viene.... ¡del supermercado!.