Hola Villabandin, ya que de momento no puedo viajar a disfrutar del sonido de ese río que pasa por la puerta de mi casa y que me llena de vida, que no puedo admirar ese cielo nocturno cubierto de estrellas, que no puedo conversar con esos vecinos recios y cariñosos, que no puedo caminar por la nieve y sentirme como en una nube, que no puedo medir y soñar como voy a restaurar la casa de mis sueños, que no puedo acariciar la piedra y flipar con el musgo, que no puedo acompañar a mis amigos a una feria de ganado o tomar un café con gotas; tantas cosas que añoro a pesar del corto tiempo que he estado entre vosotros, desde un rincón de Málaga, os saludo y espero que pase el tiempo muy rápido hasta que pueda disfrutar de tanta grandeza.