Quería sólo contestar a la persona que tan alegremente no duda en atemorizar al pueblo ante la llegada del progreso. Simplemente decirle que el que está contaminado es él. Sí, contaminado por las informaciones que ha leido en los medios de comunicación sobre casos de vecinos que salen protestando por los SUPUESTOS perjuicios a la salud que tienen las antenas de telefonía móvil.
Hasta la actualidad ninguna organización con credibilidad ha podido demostrar una relación directa entre el aumento de cancer y la emisión de ondas electromagneticas a la frecuencia de telefonía movil. Y se han hecho varios estudios tanto por parte de la Organización mundial de la salud como por parte de la Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT) unicamente se ha podido constatar un aumento de la temperatura cerebral de décimas por la proximidad del teléfono móvil a la cabeza cuando se habla a menos de 2 cms. De distancia. Imagínese la incidencia que puede tener una antena a casi 1 km del pueblo, aunque la potencia de transmisión sea mayor.
Y por supuesto nunca había oido una barbaridad tan grande como que el agua se contamina con ondas electromagnéticas cuyo medio de transmisión ese el aire.
En todo caso el agua se contamina por el uso de pesticidas y herbicidas agrícolas, de eso sí que debería estar preocupada esa persona que escribió y de con qué periodicidad se analiza (sospecho que no muy frecuentemente). Para su información la energía eléctrica que consume esa persona es alterna y por tanto también tiene una frecuencia, de 50 Hz que porvoca un ligero campo electromagnético apreciable dentro de cualquier lugar de nuestros hogares. Cortemos la luz o moriremos todos. Y que me dice de la emisión electromagnética de pantallas de ordenador, televisión, etc. ¿Se ha preocupado de no ponerse junto al microondas cuando cocina? ¡Cuidado ahí la potencia sí es mucho más alta y podría quedarse esteril si no esta convenientemente apantallado!
En fín, no quiero demostrar nada como Fraga cuando se bañó en Palomares pero que no sé preocupe tanto o le entrará un cancer de estómago.
Trabajo en un centro de comunicaciones bajo una terraza con todo tipo de antenas, enlace de microondas incluido y donde se hacen mediciones de emisiones con regularidad y espero no morirme en los próximos 70 años por este motivo. Y puntualizo que aunque soy ingeniero, no pertenezco a Movistar o alguno de los otros operadores de telefonía móvil.
Saludos y larga vida a los vecinos de Villamizar.
Felices fiestas.
Hasta la actualidad ninguna organización con credibilidad ha podido demostrar una relación directa entre el aumento de cancer y la emisión de ondas electromagneticas a la frecuencia de telefonía movil. Y se han hecho varios estudios tanto por parte de la Organización mundial de la salud como por parte de la Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT) unicamente se ha podido constatar un aumento de la temperatura cerebral de décimas por la proximidad del teléfono móvil a la cabeza cuando se habla a menos de 2 cms. De distancia. Imagínese la incidencia que puede tener una antena a casi 1 km del pueblo, aunque la potencia de transmisión sea mayor.
Y por supuesto nunca había oido una barbaridad tan grande como que el agua se contamina con ondas electromagnéticas cuyo medio de transmisión ese el aire.
En todo caso el agua se contamina por el uso de pesticidas y herbicidas agrícolas, de eso sí que debería estar preocupada esa persona que escribió y de con qué periodicidad se analiza (sospecho que no muy frecuentemente). Para su información la energía eléctrica que consume esa persona es alterna y por tanto también tiene una frecuencia, de 50 Hz que porvoca un ligero campo electromagnético apreciable dentro de cualquier lugar de nuestros hogares. Cortemos la luz o moriremos todos. Y que me dice de la emisión electromagnética de pantallas de ordenador, televisión, etc. ¿Se ha preocupado de no ponerse junto al microondas cuando cocina? ¡Cuidado ahí la potencia sí es mucho más alta y podría quedarse esteril si no esta convenientemente apantallado!
En fín, no quiero demostrar nada como Fraga cuando se bañó en Palomares pero que no sé preocupe tanto o le entrará un cancer de estómago.
Trabajo en un centro de comunicaciones bajo una terraza con todo tipo de antenas, enlace de microondas incluido y donde se hacen mediciones de emisiones con regularidad y espero no morirme en los próximos 70 años por este motivo. Y puntualizo que aunque soy ingeniero, no pertenezco a Movistar o alguno de los otros operadores de telefonía móvil.
Saludos y larga vida a los vecinos de Villamizar.
Felices fiestas.