El actual campo de fútbol se asienta en lo que fue un lugar denominado por los de mi época "la isla". Allí transcurrieron mis juegos infantiles y mis primeras aventuras.
Al lado mismo del actual campo de fútbol existe un Colegio en el que aprendí y me enseñaron gran parte del conocimiento que poseo y mi afición al deporte y a la literatura. Ambas disciplinas han estado en mi desde siempre como amigos que esperan en cada esquina para educarnos. En este sentido, no puedo por menos que rendir un sincero homenaje a José Bardón y a Armando, que ejercieron el magisterio en esas tierras hace casi treinta años. El primero me enseñó a descubrir a Benavente, Lope, Cela, Espronceda, Machado, Alberti, León Felipe, Sénder..., sin que dejara de crecer en mi ese gusanillo de la aventura del arte de contar mentiras como verdades y verdades como mentiras, todas ellas inventadas de no sé dónde. El segundo me enseñó el oficio de aprender jugando entre clase y clase de "historia" y "ciencias".
No puedo revivir el pasado como me gustaría, pero si fuera posible me gustaría dar las gracias por todo lo que soy a todos los que representaron algo en mi vida sin ellos saberlos. Ellos son los héroes anónimos que ilustraron la educación cuando el arte de enseñar no respondía a un programa previo.
Al lado mismo del actual campo de fútbol existe un Colegio en el que aprendí y me enseñaron gran parte del conocimiento que poseo y mi afición al deporte y a la literatura. Ambas disciplinas han estado en mi desde siempre como amigos que esperan en cada esquina para educarnos. En este sentido, no puedo por menos que rendir un sincero homenaje a José Bardón y a Armando, que ejercieron el magisterio en esas tierras hace casi treinta años. El primero me enseñó a descubrir a Benavente, Lope, Cela, Espronceda, Machado, Alberti, León Felipe, Sénder..., sin que dejara de crecer en mi ese gusanillo de la aventura del arte de contar mentiras como verdades y verdades como mentiras, todas ellas inventadas de no sé dónde. El segundo me enseñó el oficio de aprender jugando entre clase y clase de "historia" y "ciencias".
No puedo revivir el pasado como me gustaría, pero si fuera posible me gustaría dar las gracias por todo lo que soy a todos los que representaron algo en mi vida sin ellos saberlos. Ellos son los héroes anónimos que ilustraron la educación cuando el arte de enseñar no respondía a un programa previo.