El grupo de los más estrechos colaboradores Lade Antonio
Viñayo -con quien han venido trabajando durante casi cuarenta años-, se ha encargado de preparar un gran
homenaje al abad emérito de
San Isidoro con motivo de su jubilación canónica. El primer peldaño de este reconocimiento al gran divulgador, gran conocedor tanto de la Basílica como de todo
León, memoria viva de la ciudad, ha sido la publicación de Andanzas y visiones del León del siglo XX. Tres primeras salidas al mundo de un niño rural,
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