Poco despues e su nacimiento, allá por la espalda del
gigante, en las
lagunas de
Fuentes Carrionas, éste le regala
aguas de su negro
lago, con idéntico nombre desciende pequeño y torrentero queriendo escapar de las dos
torres pétreas que le circundan: Peña Prieta (2.536 m) y Curavacas (2.520 m).