Todas las mañanas, cuando estoy en Alar, con el primero que me encuentro es con mi vecino Mata. Cuando yo voy, él viene. Está hecho un campeón, a las 7 de la mañana ya está en marcha y no para en todo el día.
¿Boina? No, lo que si lleva, a veces, es una gorra. Yo creo que es este Mata al que te refieres. En esta foto se puede ver a Mata de buena mañana.
Felipe y Albi, regentaban el antiguo quiosco, esos que te dieron “grandes momentos de gloria”. Felipe ya hace años que se murió, “la Albi” está... Pues yo trabajé en teléfonos cuando estaba Carola. Yo también me acuerdo de aquella centralita. Aunque nunca llegue a entablar conversación alguna, ya que era muy niño. Pero si que recuerdo el teléfono que teníamos en casa... sin roseta para marcar. Descolgabas, y le decías a la operadora donde querías llamar, y ella te ponía. Las operadoras se enteraban entonces de mas cosas que ahora "la Patiño" Raúl, al hilo de lo que comentas del teléfono en Alar, recuerdo la centralita que regentaba la señora Resu al lado de la tienda de bicicletas de Vatierra.
Si recibías una conferencia, te daban el aviso en casa para estar en la centralita a la hora prevista.
Sonaba el timbre, se manipulaban las clavijas y a continuación te indicaban que podías pasar a la cabina.
Por supuesto la conversación nunca era privada, la sensación era lo mas parecido a estar en un confesionario.