obra de teatro, ALAR DEL REY

Toña Crespo con la falda a cuadros
Pompilio, era el propietario del comercio de telas existente en todo el bajo que da a la plaza, era como comerciante toda una institución en Alar. Lo que no se en que año cerró su negocio. En efecto vivía en el primer piso de la casa donde estaba su negocio.
Por supuesto que no me importa que me corrijan. Ya lo he dicho anteriormente, soy muy mala fisonomista… las caras me suenan, pero como ves no acierto ni una.
No se si es Flora o Lola, pero es verdad que es de la familia de Coren.

De Pompilio no me acuerdo, alguien me dijo un día que estábamos hablando del nombre de las plazas del pueblo que era un hombre muy peculiar que vivía encima del Banco de Santander.

Hay una plaza en Alar que a lo largo del tiempo ha recibido varios nombres… de los...
A mí también me parece Carmina Ortiz. Era muy amiga de Seby Sanz, hija del que por aquellos tiempos fuera el molinero-jefe de la fábrica de harinas, y ambas de mi pandilla. Sé que vive en Madrid, y pese a que yo también "ando" (es un decir porque casi siempre voy en coche) por aquí más de cuarenta años, nunca más he sabido de ella. Era un encanto de mujer y supongo que lo seguirá siendo.
No tresces, esta escena no tiene nada que ver con Caperucita Roja, quizá el decorado se aprovechó de una para la otra pues en aquellos tiempos como ahora no estaba la economía para dispendios.
La actriz de la falda larga y el bastòn me parece Carmina Ortiz, la sobrina de Pompilio ¿os acordaís de Pompilio?, ¡que personaje tan curioso!; a Carmina la recuerdo como una chavala encantadora y simpatiquísima
Perdon a todos, hacia tiempo q no pasaba x aqui y no me he enterado d los mensajes, pensaba q la pagina me avisaria en caso d haber comentarios.
Saludos Azul, pues si s una pena q ninguna d las dos Toñas pueda contarnos cosas d esa foto y otras. Y es una pena no haber tenido curiosidad y estos medios para saber d ellas. Hasta hace poco las tenia guardadas a la espera d q quiza algun dia, algun familiar d x alli me hiciera una visita y poder ensecharselas para ver q me contaba. Afortunadamente tresces...