Comenta el fotógrafo anónimo que nadie escribe sus impresiones sobre esta bella fotografía. Bueno, yo te ayudo.
Me gusta mucho; su poderío que se acentúa sobre un cielo más que pálido, gélido. Sólo hay que fijarse en la escarcha como tapiz sobre el suelo y en las ramas de los álamos del fondo, que adivinan la curva del rio Pisuerga.
El lobo Quirce.
Me gusta mucho; su poderío que se acentúa sobre un cielo más que pálido, gélido. Sólo hay que fijarse en la escarcha como tapiz sobre el suelo y en las ramas de los álamos del fondo, que adivinan la curva del rio Pisuerga.
El lobo Quirce.