Ya en 1998 en el boletín AMDEALAR, lancé la idea para poder reunirnos el mayor número posible de residentes y ausentes de Alar la cual no tuvo ninguna acogida ni interés por parte de ningún alarense. Lo lamenté mucho pues soy un enamorado de Alar. En aquella ocasión era mas fácil pues podía haberse ocupado de organizarlo cualquiera de la junta de la revista antes citada hoy desaparecida, y no ha sido posible no creo que lo consigamos cosa que lamento. Ricardo