Si se humillare mi
pueblo, sobre el cual mi nombre es invocado, y oraren, y buscaren mi rostro, y se convirtieren de sus malos
caminos; entonces yo oire desde los
cielos, y perdonare sus pecados, y sanare su tierra.
Desde
San Pedro Sula
Honduras, en el corazon de Centroamérica, yo bendigo la tierra de mis antepasados. No conozco
Becerril de Campos, pero me gustaria algún dia ir y ser parte de ustedes. Mi
familia (mis abuelos: Sixto Becerril Carrillo y Brigida Delgado Arribas )emigraron de
España ... (ver texto completo)