Monumentos:
Iglesia de la Puebla de San Vicente.
Su fachada posee una puerta de tres arquivoltas, enriquecidas con baquetones y medias cañas, éstas erizadas de bolas. Los capiteles de la única pareja de columnas que posee, aunque muy erosionadas, aún muestran leones afrontados en un caso y en el otro un águila vigorosa. El ábside se fortalece con dos contrafuertes que sirven de basa, en lo alto, a cortas columnas que llegan hasta el alero. Dos franjas de tacos encintan toda la curva absidal, abriéndose entre ellas suntuosas ventanas, de las cuales la central luce en su tímpano un extraordinario entrelazo. Al lado se adosa un husillo cilíndrico. (54) Iglesia de una nave, rematada con ábside semicircular, mientras que la portada se abre a los pies de la nave a través de su arco de medio punto y tres arquivoltas. El alero, también románico, cuenta con treinta y ocho canecillos que alternan dos estilos clásicos, como son los de proa de barco y de nacela. (61) Una imposta de ajedrezado recorre, a media altura, el exterior del edificio. Se sabe que tenía pintura en la decoración interior, cuyos restos desaparecieron tras una restauración. (319)
Iglesia de Barrio de San Pedro.
Conserva su espadaña con tres ventanales y una amplia puerta inferior tapiada, de la cual sólo se ve uno de sus capiteles. (54) Destaca su espadaña, que tiene tres arcos vanos, siendo los dos inferiores de mayor tamaño que el superior. (61) Conserva canecillos de proa y nacela (319)
Iglesia de Barrio de Santa María.
La iglesia pudo servir de fortaleza o se construyó sobre los restos de un castillo, pues su espadaña se apoya sobre un recio torreón cuadrado. Este campanario abre dos únicas ventanas, limitadas con columnas y con las dovelas bicolores, en las que se alternan unos sillares de tono vinoso con otros amarillentos. Sobre la cumbre de la nave se yergue otro funcional campanil, el cual exhibe en su vértice una cruz anillada. La puerta dispone de vano apuntado, con tres arquivoltas y parejas de capiteles enriquecidos con entrelazados. En el interior atrae la arquería del presbiterio. (54) Como elementos interesantes se señalan la espadaña y sus característicos vanos de medio punto, así como los arcos exteriores formados por baquetones que apoyan en cimacios que tienen adorno vegetal. La nave principal tiene una espadaña de menor tamaño, culminada con una cruz germánica de simbolismo solar. Por último, destaca la arquería del interior del templo, en concreto, del presbiterio. (61). La portada septentrional está formada por arquivoltas que apoyan sobre capiteles vegetales y geométricos. En el muros sur del presbiterio observamos una arquería ciega, formada por cuatro arcos de medio punto, ciegos, que descanasn sobre capiteles historiados y columnas exentas. Conserva dos espadañas: una sobre el arco triunfal y la otra sobre una torre prismática adosada al ángulo sureste del ábside. Ésta última se compone de vanos de medio punto y remate de piñón; los capiteles son vegetales y con animales fantásticos. (319) web local (Circulo Románico)
Su fachada posee una puerta de tres arquivoltas, enriquecidas con baquetones y medias cañas, éstas erizadas de bolas. Los capiteles de la única pareja de columnas que posee, aunque muy erosionadas, aún muestran leones afrontados en un caso y en el otro un águila vigorosa. El ábside se fortalece con dos contrafuertes que sirven de basa, en lo alto, a cortas columnas que llegan hasta el alero. Dos franjas de tacos encintan toda la curva absidal, abriéndose entre ellas suntuosas ventanas, de las cuales la central luce en su tímpano un extraordinario entrelazo. Al lado se adosa un husillo cilíndrico. (54) Iglesia de una nave, rematada con ábside semicircular, mientras que la portada se abre a los pies de la nave a través de su arco de medio punto y tres arquivoltas. El alero, también románico, cuenta con treinta y ocho canecillos que alternan dos estilos clásicos, como son los de proa de barco y de nacela. (61) Una imposta de ajedrezado recorre, a media altura, el exterior del edificio. Se sabe que tenía pintura en la decoración interior, cuyos restos desaparecieron tras una restauración. (319)
Iglesia de Barrio de San Pedro.
Conserva su espadaña con tres ventanales y una amplia puerta inferior tapiada, de la cual sólo se ve uno de sus capiteles. (54) Destaca su espadaña, que tiene tres arcos vanos, siendo los dos inferiores de mayor tamaño que el superior. (61) Conserva canecillos de proa y nacela (319)
Iglesia de Barrio de Santa María.
La iglesia pudo servir de fortaleza o se construyó sobre los restos de un castillo, pues su espadaña se apoya sobre un recio torreón cuadrado. Este campanario abre dos únicas ventanas, limitadas con columnas y con las dovelas bicolores, en las que se alternan unos sillares de tono vinoso con otros amarillentos. Sobre la cumbre de la nave se yergue otro funcional campanil, el cual exhibe en su vértice una cruz anillada. La puerta dispone de vano apuntado, con tres arquivoltas y parejas de capiteles enriquecidos con entrelazados. En el interior atrae la arquería del presbiterio. (54) Como elementos interesantes se señalan la espadaña y sus característicos vanos de medio punto, así como los arcos exteriores formados por baquetones que apoyan en cimacios que tienen adorno vegetal. La nave principal tiene una espadaña de menor tamaño, culminada con una cruz germánica de simbolismo solar. Por último, destaca la arquería del interior del templo, en concreto, del presbiterio. (61). La portada septentrional está formada por arquivoltas que apoyan sobre capiteles vegetales y geométricos. En el muros sur del presbiterio observamos una arquería ciega, formada por cuatro arcos de medio punto, ciegos, que descanasn sobre capiteles historiados y columnas exentas. Conserva dos espadañas: una sobre el arco triunfal y la otra sobre una torre prismática adosada al ángulo sureste del ábside. Ésta última se compone de vanos de medio punto y remate de piñón; los capiteles son vegetales y con animales fantásticos. (319) web local (Circulo Románico)