A escasos 8 km al nordeste de Aguilar de Campoo se encuentra la pequeña localidad de Canduela, junto a la carretera nacional 611 en dirección a Santander. Su término municipal linda con Cantabria, y en las proximidades discurre el río Camesa.
Todo el pueblo está declarado Bien de interés cultural, y en él destacan las afamadas Casas de la Torre, ubicadas en una torre del siglo pasado convenientemente restaurada, cuya arquitectura es la más característica de la zona.
Actualmente se divide en la Casa Roja y la Casa Azul, que pueden alquilarse. Desde este alojamiento de turismo rural se puede visitar el bello paisaje kárstico del Monumento Natural Las Tuerces, en el cual se pueden realizar actividades como la escalada deportiva, la espeleología, el senderismo, los paseos a caballo y la pesca y los deportes acuáticos en el río Pisuerga.
En las cercanías de Canduela puede admirarse la ermita de Santa María, rehabilitada por el Centro de Estudios del Románico hace pocos años. Consta de una sola nave con techumbre de madera, un ábside cuadrado a la cabecera y una espadaña de tres vanos a los pies. El ábside, con bóveda de cañón apuntado, está iluminado por una ventana con arco de medio punto y sin adornos, y por una pequeña aspillera. La portada es de arco apuntado. Un guardapolvo con adornos en diente de sierra es su única ornamentación. Bajo el alero del tejado hay canecillos con decoración de tipo geométrico, aunque se pueden ver algunos con motivos animales o personajes humanos, todos ellos muy desgastados.
Todo el pueblo está declarado Bien de interés cultural, y en él destacan las afamadas Casas de la Torre, ubicadas en una torre del siglo pasado convenientemente restaurada, cuya arquitectura es la más característica de la zona.
Actualmente se divide en la Casa Roja y la Casa Azul, que pueden alquilarse. Desde este alojamiento de turismo rural se puede visitar el bello paisaje kárstico del Monumento Natural Las Tuerces, en el cual se pueden realizar actividades como la escalada deportiva, la espeleología, el senderismo, los paseos a caballo y la pesca y los deportes acuáticos en el río Pisuerga.
En las cercanías de Canduela puede admirarse la ermita de Santa María, rehabilitada por el Centro de Estudios del Románico hace pocos años. Consta de una sola nave con techumbre de madera, un ábside cuadrado a la cabecera y una espadaña de tres vanos a los pies. El ábside, con bóveda de cañón apuntado, está iluminado por una ventana con arco de medio punto y sin adornos, y por una pequeña aspillera. La portada es de arco apuntado. Un guardapolvo con adornos en diente de sierra es su única ornamentación. Bajo el alero del tejado hay canecillos con decoración de tipo geométrico, aunque se pueden ver algunos con motivos animales o personajes humanos, todos ellos muy desgastados.
