Una mujer con una minifalda diminuta,
botas hasta los muslos y un top con-
feccionado con cadenas pasó junto a
su mesa. Bajo las pestañas cargadas
de rimel sus ojos brillaron con un
seductor destello. Mientras se con-
toneaba como si sus caderas tuvieran
una doble articulación.
J. R. WARD.
botas hasta los muslos y un top con-
feccionado con cadenas pasó junto a
su mesa. Bajo las pestañas cargadas
de rimel sus ojos brillaron con un
seductor destello. Mientras se con-
toneaba como si sus caderas tuvieran
una doble articulación.
J. R. WARD.