Acacio Belandra, fue un hombre que abordó todas las
dimensiones de la doctrina de los Derechos Humanos.
Puso en practica la denuncia mediante la fundación
de la Defensoría del niño. Niño y Adolescente de El
Nula y la Comisión de Justicia y Paz, encargadas en
su parroquia de atender a todas las personas víctimas
de alguna violación de sus derechos.
Además se encargó de la prevención, siendo pionero en
educación para la paz y los derechos humanos, a través
de la capacitación docente y comunitaria. Fue un gran
defensor de los derechos de los refugiados. Uno de los
pocos que se atrevio a denunciar públicamente el
reclutamiento forzado de niños en EL Nula, los abusos
contra los refugiados y la presencia de las FARC Y el
ELN en territorio venezolano. Su liderazgo dio impulso
al trabajo del Servicio Jesuita a ls Refugiados en
Venezuela, entre otros proyectos que hoy ayudan a mejorar
las condiciones de pobreza y exclusión que vive la gente
en esa frontera-
Acacio murió el 10 de diciembre de 2012, pero su lucha
continua. Gracias, Acacio, por ser nuestro maestro, pero
sobre todo por ntu testimonio radical de entrega y servicio.
dimensiones de la doctrina de los Derechos Humanos.
Puso en practica la denuncia mediante la fundación
de la Defensoría del niño. Niño y Adolescente de El
Nula y la Comisión de Justicia y Paz, encargadas en
su parroquia de atender a todas las personas víctimas
de alguna violación de sus derechos.
Además se encargó de la prevención, siendo pionero en
educación para la paz y los derechos humanos, a través
de la capacitación docente y comunitaria. Fue un gran
defensor de los derechos de los refugiados. Uno de los
pocos que se atrevio a denunciar públicamente el
reclutamiento forzado de niños en EL Nula, los abusos
contra los refugiados y la presencia de las FARC Y el
ELN en territorio venezolano. Su liderazgo dio impulso
al trabajo del Servicio Jesuita a ls Refugiados en
Venezuela, entre otros proyectos que hoy ayudan a mejorar
las condiciones de pobreza y exclusión que vive la gente
en esa frontera-
Acacio murió el 10 de diciembre de 2012, pero su lucha
continua. Gracias, Acacio, por ser nuestro maestro, pero
sobre todo por ntu testimonio radical de entrega y servicio.