Al recordar con amargura a Dunia,
y que se había decidido a pedirle
la mano, a pesar de lo que de ella
sa decía.
Piotr Petrovich hablaba con toda
sinceridad y se sentía incluso
profundamente indignado por tan
negra ingratitud.
y que se había decidido a pedirle
la mano, a pesar de lo que de ella
sa decía.
Piotr Petrovich hablaba con toda
sinceridad y se sentía incluso
profundamente indignado por tan
negra ingratitud.