CANTORAL: MI HIJA ANTES QUE EL FUTBOL...

MI HIJA ANTES QUE EL FUTBOL
Es la decisión que tomó a finales de 2001 el futbolista
argentino Ariel Giaccone. ¿La razón? La donación de uno
de sus riñones a su hija enferma, afectada de un problema
renal.
El centrocampista del Ferrocarril Oeste y el Belgrano de
Córdoba dijo: "Voy a extrañar la pelota, pero pasa a ser
algo infimo al lado de lo que me toco vivir".
Después de la operación aseguró- Jugar en el equipo que
estoy ahora, no se compara con nada en el mundo. Ni
siquiera con el Barcelona de Messi".
Esta historia empezó en abril, cuando a su hija le diag-
nosticaron una insuficiencia renal. Fue durísimo lo que
pasé. Me escapaba del entrenamiento para estar con ella
el tiempo que duraba la diálisis, eran cuatro horas in-
terminables... Verla con esa máquina al lado me destrozaba", afirmaba.
A pesar de sentirse en forma y con 36 años, dejó el deporte
para asegurar la vida de su hija. "Hoy la veo recuperada y
me explota el corazón".
Su intención es dedicarse a su hija y montar una escuela de
futbol donde transmitirá a los niños los valores que aprendio
de la profesión, apoyando y respetando a los demás.