Evocaré a estas sufridas mujeres, madrugadoras, con
su toquilla al cuello, sus guantes con dediles para
cubrir sus dolorosos sabañones. Portaban una cesta
repleta de churros y porras para su venta.
ANGEL J. OLIVARES
su toquilla al cuello, sus guantes con dediles para
cubrir sus dolorosos sabañones. Portaban una cesta
repleta de churros y porras para su venta.
ANGEL J. OLIVARES