Son los primeros días de enero, todo está gris y blanco. En un pequeño claro desde la
carretera de la Pernía, una
foto apresurada del ambiente invernal.
A la derecha la gran nave lleva casi veinte años construida y fue un proyecto que el tiempo dejó obsoleto. Ferial de
ganados para evitar los problemas de las
ferias ganaderas que se celebraban ciertos días del año al aire libre, desde tiempo inmemorial.
Ya se ha convertido en un
edificio de usos múltiples, especialmente deportivos.