Según lo que veo, ese año de 2010 dediqué tiempo a fotografiar el Pico, muy distinto de lo que hice al siguiente.
En la foto de hoy maravilla lo lozana que se ve la vegetación, aunque si la miro con detalle la primera impresión es errónea.
Es el verde intenso de las coníferas del Castillo, muy desarrolladas ya, pero detrás en ella en el hayedo de Pico Almonga se ven los tonos rojizos acordes con el mes de octubre.
Destaca el haya chaparra que crece en el borde de la línea del Pico, que ha resistido el embate de los años y la fuerza del viento siempre presente en un lugar que separa dos vertientes.

(5 de Octubre de 2010)