Esta
foto refleja el centro de todas las miradas que visitan la
terraza del
Parador Nacional de
Fuentes Carrionas. Un centro siempre bello en las cuatro
estaciones del año.
La foto del
verano nos muestra una sinfonía de
colores alegres, desde el azul del
cielo o el
agua del
pantano de
Ruesga, a los matices verdes de los bosques de robles o de los abundantes hayedos del entorno norte de la cordillera (en este caso de extremo oriental de la del Brezo).
Y otro
color es el blanco gris algo azulado de las
montañas calcáreas que cierran el horizonte. En la
fotografía atenuado por el verde de un año lluvioso en
primavera.