Doy la vuelta y... La vista perfecta. El
monumento a cuya inauguración asistí de niño -1945- es el centro de la
foto. Se le ha desposeído de sus signos y me permito desde mi formación histórica renegar de ello. El hombre es el único animal que tropieza en la misma
piedra. Los egipcios, los sucesivos imperios que en el mundo han sido, han seguido esos parámetros, arrasar lo anterior en nombre del progreso. ¿Cuántos vestigios históricos han sucumbido por esa conducta humana que hoy serían aclamados por el
arte, como un legado precioso?
Se me va la cabeza. ¿Fueron los
romanos unos benefactores de los hispanos en la mayoría de los aspectos cotidianos? Pues no hay hoy ciudad que tenga restos suyos, que no los magnifique y no es difícil pensar que fueron a costa de muchos antepasados nuestros. Se me ha ido la olla, que lo vamos a hacer.