Construido en la década de 1950 sobre el terreno de una
huerta, cerró por el Este y convirtió en
Plaza lo que hoy es Plaza de la
Cruz.
El mérito del magnífico
edificio es haberle dado el arquitecto madrileño, Antonio Galán Lechuga, 1955 se lee en una
piedra de su porche, que le diseñó en estilo acorde con la Villa.