Las casas del Campizal, fue el sueño de alguien antes de que explotara la "burbuja inmiliaria". Un terreno con historia. Fue propiedad de un convento de Agustinos, que sufrió los efectos de la invasión francesa. Extensa, envidiada por los antiguos ganaderos y agricultores, fue urbanizada con calles nombradas ya, con conexiones eléctricas, con servicio de agua, con servicios varios... Dividida en parcelas desiguales para que sirviera a gente diversa y con sueños diversos.