La última vez que fuí a Cevico era por Semana Santa y recuerdo que asistimos a una procesión que salía desde arriba de la iglesia y que después recorría todo el pueblo. La asistencia fué mayoritaria, e incluso, de gentes de otros pueblos.Fué emocionante.
En otra ocasión se me ocurrió ayudar a quitar los cardos de una plantacion de remolacha, en la finca de un hermano de mi cuñao y, !bueno! acabé desriñonao.
La visita a las bodegas son cosa obligada, !claro!. Y qué bien sabe el vino de esta tiera así, tan fresquito, allá abajo, en la cueva horadada por el gran trabajo hecho por vuestros antepasados.
(Otro día más historias)
J.
En otra ocasión se me ocurrió ayudar a quitar los cardos de una plantacion de remolacha, en la finca de un hermano de mi cuñao y, !bueno! acabé desriñonao.
La visita a las bodegas son cosa obligada, !claro!. Y qué bien sabe el vino de esta tiera así, tan fresquito, allá abajo, en la cueva horadada por el gran trabajo hecho por vuestros antepasados.
(Otro día más historias)
J.