He entrado como podras ver por la hora un poco tarde pero dado que me habias dicho que ibas a poner fotos de nieve no he podido reprimirme y cuando he entrado y he visto la peña de cantoral toda nevada me he llevado una alegria enorme y me he animado a entrar en el foro y mandar un mensaje, quiza me la ponga como fodo de pantalla la foto, me encanta cuanto quieres a tu pueblo más que yo al mío y es decir, se nota cuando escribes y en las fotos que envias, ya me atrevo a decirte algo más, quizas deberiamos ir preparando ese libro tu de tu pueblo y yo del mio, dehesa ya lo tiene, castrejon, traspeña porque no nosotros, un saludo y un fuerte abrazo ciertamente me he emocionado.
Hola Saturnino. Me alegro que te gustase la foto. Realmente era impresionante el color blanco de la peña de Cantoral, sobre todo cuando salió brevemente el sol, era cegador el resplandor que emitía, ni siquiera las fotos pueden dar una idea de la imagen, por eso dije que es un espectáculo digno de ver en directo.
Yo aprecio mucho mi pueblo, porque toda mi familia es de aquí. Tengo antepasados directos de hace cuatrocientos años que ya vivían en Colmenares. La parte más feliz de la vida de una persona, que es o debiera ser la infancia, yo la pasé en este pueblo, y lo primero que ví en mi vida, mis primeros recuerdos, son de aquí. Por tanto, no puedo sentir otra cosa que aprecio; pero es que además dada la problemática actual del mundo rural, y de Palencia en particular, donde tantas cosas, tantos recuerdos, palabras, fechas, lugares, tradiciones, corren peligro de perderse; donde está comprometida la supervivencia misma de nuestros pueblos, ya que nos estamos quedando sin gente que los habite; de esta manera, el aprecio y el cariño se convierten también, para mi al menos, en un deber, una obligación moral hacia estos lugares de los que procedemos.
Yo tengo escritas varias cosas sobre Colmenares, sobre todo un trabajo que hice en mi carrera sobre arquitectura popular que me gustaría completar y dar a conocer; lo del libro es una iniciativa que merece tenerse en cuenta. Hay que pensar en ello. Saludos!
Yo aprecio mucho mi pueblo, porque toda mi familia es de aquí. Tengo antepasados directos de hace cuatrocientos años que ya vivían en Colmenares. La parte más feliz de la vida de una persona, que es o debiera ser la infancia, yo la pasé en este pueblo, y lo primero que ví en mi vida, mis primeros recuerdos, son de aquí. Por tanto, no puedo sentir otra cosa que aprecio; pero es que además dada la problemática actual del mundo rural, y de Palencia en particular, donde tantas cosas, tantos recuerdos, palabras, fechas, lugares, tradiciones, corren peligro de perderse; donde está comprometida la supervivencia misma de nuestros pueblos, ya que nos estamos quedando sin gente que los habite; de esta manera, el aprecio y el cariño se convierten también, para mi al menos, en un deber, una obligación moral hacia estos lugares de los que procedemos.
Yo tengo escritas varias cosas sobre Colmenares, sobre todo un trabajo que hice en mi carrera sobre arquitectura popular que me gustaría completar y dar a conocer; lo del libro es una iniciativa que merece tenerse en cuenta. Hay que pensar en ello. Saludos!