
Acabo de poner algunas fotos que hice el pasado mes de mayo. Aunque la primavera ha tardado en llegar (ha sido una Semana Santa y meses de abril y mayo extraordinariamente fríos y lluviosos), por fin está aquí, casi de repente: flores en los árboles, en las praderas, en los jardines y alrededores de las casas; maleza verde que casi llega hasta la rodilla; y por fin cielo despejado y aire cálido. En realidad, poco queda ya para que esta primavera se convierta en verano pleno; ya se siega la hierba y los campos de cereal verdean brevemente antes de que el calor sofocante los vuelva amarillos. Pero, sobre todo, se aprecia el buen tiempo en los sonidos que nos trae la naturaleza: basta pasar fuera un rato por la noche o al atardecer para escuchar los grillos, las ranas, el cuco, el oscuro sonido que emiten las lechuzas y búhos, los zorros -que tanto abundan- con su chillido desagradable; en fin, llega como todos los años el buen tiempo, y como todos los años esperamos que vayan volviendo también las gentes que marcharon en invierno. Saludos a todos.