La primera casa que ves, Charo, era la de un matrimonio muy agradable que conocíamos mi familia, con el hijo mayor, (le llamábamos Moronta) alternabamos bastante, e incluso jugabamos al futbol en los prados delanteros de la casa, los otros hijos, una era mujer, tenían la mirada limpia y afable.
La casa que ves en su parte baja tenían un almacen y solían hacer transportes, deben continuar porque se observa un camión en la puerta.
La otra casa, que debe de ser a la que te refieres del amigo de tu hijo, no recuerdo mucho, aunque me suena un poco el nombre, y despues estaba el horno de pan de Anselmo Olmos que dejó de funcionar, cuando alguno de la familia, Ladislao entre ellos, se fueron a trabajar a Alemania en tiempo de la emigración, posterirmente volvieron.
Ladislao era amigo mío, según me han dicho se casó y vive en Burgos, y ya es abuelo.
¡Dios mío, cómo pasa el tiempo!.
La verdad es que esa zona del pueblo era muy bonita, desde ahí partía un camino entre los prados con desrino a Baños de la Peña.
Un recuerdo muy especial para todos, y un abrazo cordial para Irene, Raquel, Asun..... y cómo no para tí Charo que siempre respondes y nos asombras con tus conocimientos.
Eduardo
La casa que ves en su parte baja tenían un almacen y solían hacer transportes, deben continuar porque se observa un camión en la puerta.
La otra casa, que debe de ser a la que te refieres del amigo de tu hijo, no recuerdo mucho, aunque me suena un poco el nombre, y despues estaba el horno de pan de Anselmo Olmos que dejó de funcionar, cuando alguno de la familia, Ladislao entre ellos, se fueron a trabajar a Alemania en tiempo de la emigración, posterirmente volvieron.
Ladislao era amigo mío, según me han dicho se casó y vive en Burgos, y ya es abuelo.
¡Dios mío, cómo pasa el tiempo!.
La verdad es que esa zona del pueblo era muy bonita, desde ahí partía un camino entre los prados con desrino a Baños de la Peña.
Un recuerdo muy especial para todos, y un abrazo cordial para Irene, Raquel, Asun..... y cómo no para tí Charo que siempre respondes y nos asombras con tus conocimientos.
Eduardo