¡Es asombroso encontrar ésta pieza de
museo!
Mi madre, y hoy mi hermana, posee una chocolatera como ésta donde mi abuela nos hacía el chocolate a los nietos, y según mi tío que era un entendido en la materia, había que ponerlo tres veces en el fuego, para que tuviera mejor sabor.
¡De quien sea mi enhorabuena por poseerlo! Eduardo.