Recuerdo que la parte rosacea de éste cardo, nos lo tirábamos unos a otros y se quedaba prendido en la ropa.
También se hacía lo que tú dices, Charo, incluso en agosto, cuando soplaba el "Cierzo", que apetecía calentarse y buscábamos el remanso al sol, y cuando anochecía, a casa, al calor de la lumbre de la trébede, donde estaban las famosas e incomparábles sopas de ajo que eran un placer comérselas.
¡Que hermosos tiempos que estamos rememorando y que por desgracia no volverán!.
Un cordial saludo para tí Charo, Emigrao que espero te repongas, y a todos/as que entren en el foro.
Eduardo.
También se hacía lo que tú dices, Charo, incluso en agosto, cuando soplaba el "Cierzo", que apetecía calentarse y buscábamos el remanso al sol, y cuando anochecía, a casa, al calor de la lumbre de la trébede, donde estaban las famosas e incomparábles sopas de ajo que eran un placer comérselas.
¡Que hermosos tiempos que estamos rememorando y que por desgracia no volverán!.
Un cordial saludo para tí Charo, Emigrao que espero te repongas, y a todos/as que entren en el foro.
Eduardo.