DUEÑAS: Soy botijera y no vivo en dueñas, pero es una pena...

Soy botijera y no vivo en dueñas, pero es una pena que en cualquier pueblo de España se cierre un centro academico que permita a los padres elegir como continuar la educación de sus hijos.El cierre de un colegio nunca puede ser alegría para nadie.Yo llevo a mis hijos a un colegio público pero hay que respetar la variedad y agradecer la oportunidad de poder escoger. Las madres tendrán muchos humos pero es justo agradecer a las monjas lo que han hecho por el pueblo y la cantidad de niños que han pasado por sus aulas.Del cole de las monjas han salido personas que han hecho de su vida y estudios lo que han querido al igual que de la escuela. Dejemos las diferencias y preocupémonos de lo que el pueblo esta perdiendo y esta es una pérdida importante.