Llegó el momento de situar en su lugar adecuado y hacer más presentes nuestras vivencias infantiles y juveniles, que durante todo un año han estado pululando en nuestros pensamientos.
Estamos ya ante el segundo domingo de Agosto, en el que intentamos convivir un poco tiempo todos los que, después de tantos avatares durante una larga vida, hemos tenido la suerte aún de haberlos vencido y de poder estar aquí.
El día 9 de AGOSTO, según costumbre, tendremos un encuentro en Gramedo todos, incluso los que no sean nacidos en el pueblo, a los que acogeremos con gran alegría, como solemos hacer siempre en este pueblo.
No estoy haciendo el pregón de las fiestas del pueblo, creo que ya lo sabéis. No quiero atribuirme facultades que sólo pueden tener las autoridades del pueblo y sus delegados, que en este momento no sé quiénes son. Pero, sean unos u otros, yo por ahora siempre estaré a favor del orden legítimamente establecido, y además con mucho gusto.
Espero que todos pasemos un día inolvidable, aún con la posibilidad de que apenas podamos casi ni reconocernos físicamente por los años pasados, aunque interiormente podamnos encontrarnos con una gran ilusión por vivir e intentar hacer felices a los demás.
Si el tiempo lo permite, como en años anteriores, intentaremos visitar a pie los lugares y pueblos que han formado parte de nuestro anterior existir. UN ABRAZO A TODOS;! VIVA GRAMEDO; CON SU CAMPO, PEÑABLANCA Y LA MOCHA DE POLLEDO. Perdóname desde arriba, Jesús, por atreverme a hacer una exclamación, que tenías tú patentada con todo merecimiento. EMILIANO.
Estamos ya ante el segundo domingo de Agosto, en el que intentamos convivir un poco tiempo todos los que, después de tantos avatares durante una larga vida, hemos tenido la suerte aún de haberlos vencido y de poder estar aquí.
El día 9 de AGOSTO, según costumbre, tendremos un encuentro en Gramedo todos, incluso los que no sean nacidos en el pueblo, a los que acogeremos con gran alegría, como solemos hacer siempre en este pueblo.
No estoy haciendo el pregón de las fiestas del pueblo, creo que ya lo sabéis. No quiero atribuirme facultades que sólo pueden tener las autoridades del pueblo y sus delegados, que en este momento no sé quiénes son. Pero, sean unos u otros, yo por ahora siempre estaré a favor del orden legítimamente establecido, y además con mucho gusto.
Espero que todos pasemos un día inolvidable, aún con la posibilidad de que apenas podamos casi ni reconocernos físicamente por los años pasados, aunque interiormente podamnos encontrarnos con una gran ilusión por vivir e intentar hacer felices a los demás.
Si el tiempo lo permite, como en años anteriores, intentaremos visitar a pie los lugares y pueblos que han formado parte de nuestro anterior existir. UN ABRAZO A TODOS;! VIVA GRAMEDO; CON SU CAMPO, PEÑABLANCA Y LA MOCHA DE POLLEDO. Perdóname desde arriba, Jesús, por atreverme a hacer una exclamación, que tenías tú patentada con todo merecimiento. EMILIANO.