En primer término, agachado, mi padre, Arsenio Mahamud; detrás de él, el que está en medio, es Paquito Arroyo. Los otros dos chicos no se identificarlos.
La moda baño de esa década del siglo XX no tiene desperdicio.
Al fondo se distingue el PuenteSan Francisco.
María Ángeles, me ha encantado todo lo que me has explicado de Patro. Son anécdotas que yo no conocía. Me los imagino en Madrid, primero la alegría del encuentro inesperado y después a mi padre aupándola para que viese el desfile, ¡qué bueno!
Me alegro muchisimo de que siga tan lúcida y tan bien de salud. En mi casa, como dije, se la ha apreciado siempre y sé que mi hermano Juan Carlos, cada vez que tiene oportunidad, la visita.
Muchas gracias por hacer de transmisora.
Ah! Y muy bueno lo de simplificar... Chus: Como te dije, en Navidad estuve con Patro y estuvimos hablando de tí y de tu familia, se acordaba perfectamente de todos vosotros y me estuvo contando cosas que recordaba de tu padre y de la buena amistad que les unía.
Como una vez que se vieron en Madrid mientras tu padre hacía la mili, la alegría que sintieron al verse y el abrazo que se dieron, y algo muy gracioso que me contó y que dice bastante de la confianza que se tenian.
Resulta que se vieron en un desfile militar y como tu padre... Hola arambol, pero que razón tienes con respecto a a las personas de antes, yo creo que la comida era más natural que lo que comemos ahora, por que por muy bueno que sea no tiene ni punto de comparación con las comidas de antes, y si no a la vista esta con la carne pescados etc, que vas a cocinarlos y no echan nada más que agua, y tambien pasa una cosa, que cuando vamos a comprar nos cargamos con carne o lo que sea y al congelador, que no sabemos si ya lo han tenido congelado anteriormente así que... Tengo amigos, conocidos y otros, que se mueven en un ambiente deportivo, el 50% de sus conversaciones son referentes a: ¿Cuánto tiempo empleas en hacer a el 1000?, ¿A que fisio vas? ¿tomas proteínas?. La alimentación la cuidan hasta el gramo. Etc. etc. algunos lucen unos bíceps y tabletas de chocolate envidiables para otros.
Por lo que observo en la fotografía, en la generación de nuestros padres también tenían cuerpos de envidia, bien equilibrados y del todo naturales, tomaban la cantidad de alimentos... Un día de baño en el río, estaban mi padre con un amigo metidos en el agua, pero sentados en el fondo, por lo que el agua les llegaba casi al cuello y parecía que había más caudal del que había en realidad. Cuando, llegó otro que desde la orilla preguntó: - ¿Así cubre? A lo que ellos respondieron al unísono, un ¡SÍ! rotundo. El recién llegado, cogiendo carrerilla, se tiró de cabeza y........ ¡días tardó el pobre en sacar toda la pecina que tragó!
Bueno, en aquellos años no había tele, ni Facebook,...