Creo que, el tema de los cabezudos es una asignatura pendiente y un punto a revisar en próximas fiestas. Poco a poco, van perdiendo su personalidad y los pobres cabezudos con tantas transformaciones, nada exitosas, van a acabar siendo cualquier cosa menos cabezudos. ¿Alguien arreglará algún día este entuerto a la pobre Tuerta? Francamente, está horrorosa...
Tengo fotos de los 4 básicos. Las iré colgando. Verdaderamente La Tuerta ha sufrido una transformación lamentable. Lo que sí han recuperado es las ganas de correr y la pelota con la cuerda. Mi hijo, en vez de asustarse, se ha metido el el ajo y le ha tocado correr un montón y seguro que ha recibido aunque no lo cuente.