La pastelería de la señora Nati estuvo también y creo que hasta su cierre, en los soportales de la plaza mayor donde hoy vive Pepe Sanmillan que caramelos hacia, decíamos caramelos de casa eran sin envolver pero de color rojo y amarillo transparentes y riquísimos, aun se me hace la boca agua recordando su sabor. Cuando estaba el la calle Colón y llegaban las navidades llenaba el escaparate de verdaderas maravillas realizadas en mazapán los chiguitos nos pasábamos ratos estupendos viéndolos pero no catandolos. Con vuestros comentarios de la calle Colón me habéis traído recuerdos de infancia y he pasado un buen rato. Saludos
