Joaquín.... es verdad! Qué bueno que podamos volver a ver rostros que ya han desaparecido. Una vez, hice un dibujo de Joaquín y de otro anciano, cuando ambos estaban sentados, charlando, en un banco de la placilla de la iglesia. Creo que todavía lo conservo, voy a buscarlo (a saber dónde lo encuentro!). Casi me había olvidado de ciertas caras y estas imágenes nos las devuelven. Muchas gracias, Juan Carlos.