Se dice que este linaje proviene de la casa de Velasco, aunque sus armas sean distintas. Ocurrió que uno de los hijos del Condestable de Castilla, D. Pedro de Velasco, se estableció en el valle de Mena, fundando su casa solar en el lugar de Ciella. D. Diego Hernández de Velasco, nieto del anterior, casó con Dña. Andrea Ortiz de Mendieta, siendo único hijo de este matrimonio, D. Diego de Velasco y Mendieta, Capitán de los Tercios Reales que fue a establecerse en Sevilla donde fundó casa solar y contrajo matrimonio con Dña. Úrsula Ramón de Salazar, con lo cual dio origen al linaje Salazar. Como sea que los Velasco ya existían en los tiempos de los godos, el origen del linaje Salazar habrá que buscarlo por sus ancestros, en Asturias, aunque más tarde se extendieran por toda la Península.
El escudo del apellido Salazar muestra trece estrellas de oro colocadas en tres palos y una en punta, todo sobre campo de gules
Existe una leyenda que nos cuenta como se concedio el Escudo de armas de esta familia escrito en un códice del siglo XIV, dice así: "Estando este Lope García de Salasar en la Corte del Rey en la ciudad de Toledo con Martín Ruys su abuelo, seyendo de XXV años, vino allí un moro gigante de Ververía, que era mucho corpudo e espantable, a demandar campo a pieuno por otro, y no le tomando ninguno aquella empresa, vino este Lope García ante el Rey, e su agüelo con él, e pidióle merced de aquella batalla con aquel moro, e Rey plogo mucho de ello, pareciéndole valiente e esforzado en sus palacios, e otorgógelo de voluntad, e entrados en el campo como convenía a tal fecho, ovieron a pie fuerte batalla, en que les duró de la tercia fasta las vísperas. Aque Lope García ovo ventura de lo matar por fuerza, e ardidesa con la Gracia de Dios, e cortóle la cabeza, e tomóle en una mano, e defundóle una almegia de seda negra que traya, con escudo colorado en los pechos, con XIII estrellas doradas en él, de tres en tres y una debaxo. E fuese ante el Rey que estaba mirando el campo, e fincando las rodillas antel, le pidió por merced que le diese aquellas estrellas por armas, para él e para todos los que viniesen de su linaje. E el Rey le dixo: Tu te las podías tomar, pues Dios te las dio a ganar, pero pues así es, yo te las doy de voluntad, e las otorgo a todos los que de ti sucedieren, y fisole estas mercedes”
¿Pudo ser asi?. Un apunte mas para leer en este foro. Un saludo.
El escudo del apellido Salazar muestra trece estrellas de oro colocadas en tres palos y una en punta, todo sobre campo de gules
Existe una leyenda que nos cuenta como se concedio el Escudo de armas de esta familia escrito en un códice del siglo XIV, dice así: "Estando este Lope García de Salasar en la Corte del Rey en la ciudad de Toledo con Martín Ruys su abuelo, seyendo de XXV años, vino allí un moro gigante de Ververía, que era mucho corpudo e espantable, a demandar campo a pieuno por otro, y no le tomando ninguno aquella empresa, vino este Lope García ante el Rey, e su agüelo con él, e pidióle merced de aquella batalla con aquel moro, e Rey plogo mucho de ello, pareciéndole valiente e esforzado en sus palacios, e otorgógelo de voluntad, e entrados en el campo como convenía a tal fecho, ovieron a pie fuerte batalla, en que les duró de la tercia fasta las vísperas. Aque Lope García ovo ventura de lo matar por fuerza, e ardidesa con la Gracia de Dios, e cortóle la cabeza, e tomóle en una mano, e defundóle una almegia de seda negra que traya, con escudo colorado en los pechos, con XIII estrellas doradas en él, de tres en tres y una debaxo. E fuese ante el Rey que estaba mirando el campo, e fincando las rodillas antel, le pidió por merced que le diese aquellas estrellas por armas, para él e para todos los que viniesen de su linaje. E el Rey le dixo: Tu te las podías tomar, pues Dios te las dio a ganar, pero pues así es, yo te las doy de voluntad, e las otorgo a todos los que de ti sucedieren, y fisole estas mercedes”
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Hola Gonzalo: como megusta poder leer tus mensajes un abrazo.
Muy amable Señora. Solamente por ese aplauso inmerecido, tratare de poner mas empeño en satisfacer vuestros deseos de lectura. Debo de daros las gracias por leer mis exposiciones. No soy mas que un aprediz de "plumifero" al que un alago pone alas. Beso su mano.
