El
amigo jesús, se merece el aplauso unánime de todos. Hay que ver cómo conserva
este
coche, que puede ser de finales del siglo XIX ó principios del XX.
Tiene a su favor, que es mecánico, pero también esmero, mimo y paciencia. Para él
mi reconocimiento. Un saludo de tu "quinto; Jesús sigue así.