Precioso el paso de La Borriquilla, que gusta y alegra a los más pequeño, en mí caso así también ha sido y aún continúa.
Cuando era niño el domingo de ramos en la puerta de la iglesia se descargaba un remolque de ramas de pino. Ibamos todos los chavales a recoger una rama para la procesion.
Nuestros padres nos ataban en la rama rosquillas de baño y diversas gallletas y chuches.
De esa guisa ibamos a la procesion de la borriquilla. Los adultos llevaban largas palmas y era una procesion expectacular.
Las palmas se usaban durante el año para quitar telaarañas de los altos techos de vigas de madera.
Nuestros padres nos ataban en la rama rosquillas de baño y diversas gallletas y chuches.
De esa guisa ibamos a la procesion de la borriquilla. Los adultos llevaban largas palmas y era una procesion expectacular.
Las palmas se usaban durante el año para quitar telaarañas de los altos techos de vigas de madera.