Salí de Herrera con menos de 20 años y los recuerdos de mi infancia no desaparecen. Desde entonces pasé en algunas ocasiones y es imposible parar y rezar una oración desde la puerta, es la forma en que me enseño mi padre. Teofilo.
Quería decir que es imposible no parar, es como si el coche se quedase sin gasolina
Expresas muy bien la experiencia de muchos; así lo aprendimos de pequeños; la ermita ha seguido siendo un gran referente para los que nos criamos en Herrera y nos fuimos.
Tengo la experiencia de haber tenido que "pasar de largo" sin parar en alguna ocasión, en contra de mi voluntad, y duele de verdad.
Tengo la experiencia de haber tenido que "pasar de largo" sin parar en alguna ocasión, en contra de mi voluntad, y duele de verdad.