Miro y remiro este croquis de como era mi pueblo en el siglo XVI, mi cabeza da vueltas y revueltas al igual que mi imaginación tratando de situarme y verle como era en dicho siglo XVI, al día de hoy de todo lo que representa, solamente nos queda en pie y se puede contemplar, el arco de la puerta nueva, la iglesia parroquial y la ermita, y siento una gran pena que el resto haya desaparecido.