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HERRERA DE PISUERGA: ¡Qué buena memoria, Ángel!...

¿QUÉ VA DE AYER A HOY? ¡TODA UNA VIDA!
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Ahora que los años van pasando y nos llaman abuelos, ahora que la nevada del tiempo, blanquea nuestras cabezas, va
siendo hora de recordar viejas estampas que, vivimos de niños y que nunca volverán.
Me viene a la memoria, por ejemplo, el reparto de Pan de Talega que, Salva Vallejo hacía con su carro de Toldo,
tirado por un caballo. Y por seguir con otro carro, recuerdo el del Carbonero, era de plataforma y entre las varas
iba un macho. El señor Vargas, metía los cestos de carbón de bola, hasta la cocina. Había otro Carbonero, de nombre
Daniel que, repartía carbón con un carrito de mano;éste señor tenía dos hijas mellizas.
Tampoco veremos al ermitaño, llevar por las casas la capilla de la Virgen de la Piedad. Ya no se bandeará como lo
hacía el Sr. Marcos que, después del redoble de su tambor, voceaba el bando de turno."Los Pluses" amenazando los
Cabezudos, pasó a la historia. Tampoco el señor Medrano tocará a Misa de Cruz. En casa Tadeo, parroquianos
comiendo Escabeche de barril con cebolla. A Emilio Motos "El Bolo", llevar bandejas de pasteles a la Pastelería de
Castañeda. Sra. Máxima haciendo churros. Tabales de arenques apoyados en la pared. Yuntas viniendo de arar. Plaza de
Abastos en día de Mercado. Campanilla sobre puertas de tiendas -sonaban al entrar gente-. Carteros con la Valija.
Hileras de carros de trigo, esperando su turno. Tete Chispas, con su cesta de pipas y cacahuetes colgada al cuello.
A éste popular personaje, con su carrito verde, a las puertas del Cine. Trillar en las Eras. Niños de las Escuelas,
subir los Domingos, cogidos de la mano, a Misa. Tampoco veremos mujeres con velo y misal. Apisonadora -Cilindros-
haciendo carreteras. Guardias Civiles, en Bicicleta. Carne y Pescado, envuelto en papel de estraza. Pedir en un Bar,
Tinto con sifón. Ovejas por las calles. Tampoco quedan Limpiabotas.
Algo quedará en el Tintero, pero por hoy, vale.

¡Qué buena memoria, Ángel!
¡Qué gran exposición de estampas grabadas en nuestras mentes y corazones nos haces revivir y contemplar de nuevo!
Un gran aplauso y fuerte abrazo, Mª Jesús