Mis abuelos vivieron en
La Lastra, sufrieron unos años duros, llenos de penalidades, y ellos se sorprenderían de escuchar la opinión de aquellos que les molesta pisar una "caquita de
vaca". Ciertamente seria genial que todo estuviera limpio, pero es imposible recoger todo lo que los animales dejan.
Yo tambien soy "veraneante" como dicen. Pero el
campo es el campo, y si queremos no pisar boñigas, es mejor pasear por la Castellana.
Hay que reconocer lo que hacen los ganaderos que viven hoy en La
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